El viernes 7 a la mañana llego a Madrid, sin saber muy bien a dónde ir. Medio al azar fui hasta la estación de Avenida de América, con la esperanza de encontrar internet, lo que finalmente me llevó como una hora. Al rato me encontré con Niv y Ivonne que venían de paseo por el fin de semana, y nos fuimos a almorzar a un parque cerca de la Plaza de España. Ellos se encontraron con Jesús de Hospitality Club, que los alojó y yo aproveché para dejar mi mochila. Los cuatro estuvimos un rato caminando por la ciudad y a la noche me encontré con Bego, quién me hospedó en su casa.
Con ella y sus amigos estuvimos unas horas tapeando en el barrio de la hermana, que es bastante alejado y hay más latinoamericanos que españoles. Más tarde fuimos a un pub y nos quedamos bailando hasta las 4 ó 5 de la mañana.
La mañana siguiente empezó bastante lenta. A la tarde me corté el pelo que ya lo necesitaba, y luego me fui a caminar por la ciudad. Niv e Ivonne iban a un recital y Bego salía con sus amigos, así que pasé la noche solo, de bar en bar, primero por la zona de la Plaza Mayor, y luego por Chueca, que es el barrio gay.
El domingo fui al Prado, que es gigante, y a las 2 horas huí del agobio de tanto arte :). Me encontré con Niv, pero me agarró una alergia muy molesta y que me preocupó, así que perdí como 4 horas en ir al hospital y hacerme revisar. Con una bolsota de remedios que me hicieron comprar me fui a encontrar nuevamente con Niv e Ivonne; la idea era encontrarme con Agi y otros Dudes, pero finalmente fue sólo Agi y se tuvo que ir temprano, así que no llegué a tiempo a verlo. Nos fuimos a un bar gallego a tapear un rato y luego ya fue hora de preparar equipaje e ir al aeropuerto. Como esta vez el vuelo salía tan temprano las opciones eran ir al aeropuerto a la 1 y esperar 4 horas ahí o tomar un taxi. Para probar otra alternativa, me tomé el bus nocturno N4 que va al pueblo de Barajas y desde ahí caminé con todo el equipaje. Fue menos difícil de lo que parecía.